Después de años realizando bike fittings, he llegado a una conclusión que puede sorprender a muchos ciclistas: la técnica más avanzada y las herramientas más sofisticadas no garantizan el éxito de un fitting si el cliente no tiene la actitud adecuada.
El bike fitting es mucho más que ajustar medidas y ángulos. Es un proceso colaborativo donde la mentalidad y disposición del ciclista juegan un papel fundamental tanto durante la sesión como en las semanas posteriores.
Un fitting efectivo requiere tiempo. No es raro que una sesión completa tome entre 2 y 4 horas, con múltiples ajustes y pruebas. Los clientes que llegan esperando una "solución mágica" en 30 minutos suelen experimentar frustración y resultados subóptimos.
¿Por qué es importante la paciencia?
Cada ajuste necesita tiempo para que el cuerpo se adapte
Los cambios pequeños pueden tener efectos grandes
La precisión requiere iteraciones múltiples
Durante el fitting, tu feedback es nuestra herramienta más valiosa. Un cliente que comunica claramente sus sensaciones, molestias o mejoras nos permite hacer ajustes más precisos.
Clientes que facilitan el proceso:
Describen sensaciones específicas ("siento presión en la rodilla izquierda al pedalear")
Son honestos sobre su nivel de forma física y experiencia
Mencionan lesiones previas o limitaciones físicas
Lo que complica el proceso:
Respuestas vagas ("se siente bien" o "no sé")
Ocultar información sobre dolores o lesiones
Expectativas poco realistas sobre resultados inmediatos
Muchos ciclistas llegan con ideas preconcebidas sobre cómo debe estar configurada su bicicleta. La resistencia al cambio puede limitar significativamente los beneficios del fitting.
He visto casos donde un ajuste de sillín de apenas 2 centímetros genera rechazo inicial, pero después de unas salidas se convierte en el cambio que revoluciona la comodidad del ciclista.
Contrario a lo que muchos esperan, las primeras salidas después de un fitting pueden sentirse "extrañas". Esto es completamente normal y esperado.
¿Por qué sucede esto?
Tu cuerpo tiene memoria muscular de la posición anterior
Los músculos necesitan adaptarse a nuevos ángulos de trabajo
El sistema nervioso requiere tiempo para automatizar los nuevos patrones de movimiento
Período de adaptación típico:
Primeras 3-5 salidas: Sensación de novedad, posibles molestias menores
1-2 semanas: Adaptación gradual, mejoras en comodidad
3-4 semanas: Integración completa de los cambios
Los clientes más exitosos son aquellos que mantienen comunicación durante el período de adaptación. Esto nos permite:
Realizar micro-ajustes si es necesario
Tranquilizar sobre sensaciones normales del proceso
Identificar posibles problemas temprano
Aquel que espera resultados inmediatos y se frustra si no los obtiene en la primera salida. Suele abandonar el proceso antes de que la adaptación se complete.
El ciclista que llega convencido de que ya sabe cómo debe estar su bicicleta y se resiste a cualquier cambio significativo. Limita el potencial de mejora al mantener configuraciones subóptimas.
Quien no proporciona feedback claro durante la sesión y luego se queja de los resultados. Sin información precisa, es imposible realizar ajustes efectivos.
Comunica claramente sus sensaciones
Mantiene una mente abierta a los cambios
Entiende que el fitting es un proceso, no un evento
Respeta los tiempos de adaptación
Mantiene comunicación durante el período post-fitting
Da oportunidad real a los cambios antes de juzgar resultados
Hace preguntas para entender el "por qué" de cada ajuste
Se interesa en aprender sobre biomecánica básica
Valora el proceso tanto como los resultados
Llega sin expectativas rígidas sobre el resultado
Prepárate para invertir el tiempo necesario
Considera el fitting como una inversión en tu futuro ciclístico
Sé específico en tus descripciones
No tengas miedo de mencionar cualquier molestia
Confía en el proceso y en la experiencia del fitter
Dale tiempo a tu cuerpo para adaptarse
Documenta tus sensaciones en las primeras salidas
Mantén comunicación abierta con tu fitter
El bike fitting es una inversión en tu comodidad, rendimiento y salud a largo plazo. Sin embargo, su éxito no depende únicamente de la tecnología o la experiencia del profesional, sino también de tu actitud y compromiso con el proceso.
Recuerda: no estás comprando una solución instantánea, estás invirtiendo en un proceso de optimización que requiere tu participación activa y paciencia.
La diferencia entre un fitting exitoso y uno fallido a menudo radica no en los milímetros ajustados, sino en la mentalidad con la que el ciclista aborda todo el proceso.
¿Has tenido experiencias con bike fitting? ¿Qué actitud adoptaste y cómo influyó en tus resultados? Comparte tu experiencia en los comentarios.